Para empezar necesitamos preparar el material, lanas de colores, unos trocitos de cartón, unos clips de papelería y unas tijeras.
Recortamos los cartones con esta forma, es importante hacer cuatro formas iguales, para trabajar con ellas mejor.
Las juntamos de dos en dos, para hacer la parte de delante con la cara del animal y la parte de atrás con la cabeza. Es importante dejar bien los extremos para luego poder unirlas.
Ahora vamos a empezar con el koala, utilizamos negro para hacer la nariz, y enroscamos en la zona central de la cartulina. Debajo de la nariz ponemos el blanco de las barbas del koala, y luego lo cubrimos todo de gris, para formar el resto de la cabeza,
Después hacemos los ojos, con lana negra, a la altura de la parte superior de la nariz, le damos entre tres y cinco vueltas.
Repetimos con un par de capas de gris al menos en todo el pom pom.
Para hacer las orejas, en la parte superior (siempre tener en cuenta que coloco el cartón con la parte superior hacia arriba, para orientarme y colocar los ojos y las orejas, es una buena opción marcar los cartones con una flecha, o escribir en los extremos arriba y abajo), colocamos un lápiz y enroscamos la lana con el cartón y el lápiz, teniendo cuidado de que no se nos coma los extremos.
Empezamos con los otros dos cartones, y lo hacemos casi tan gordito como la parte de delante.
Y lo hacemos así, de dos en dos, utilizando cuatro clips, de un tamaño apropiado al del cartón. Os lo muestro bien desde todos los ángulos para que no haya dudas.
En esta foto, se ve la separación entre los cartones sobre los que enroscamos las lanas, y por ahí vamos a empezar a recortar con cuidado, metiendo la tijera por entre los cartones y cortando la lana hacia fuera, como en un pom pom normal.
Hasta que queda más o menos así. Y entonces, pasamos un trozo de lana por entre los dos cartones de arriba a abajo, le hacemos un nudo y luego lo cruzamos hacia arriba y hacemos doble nudo, y dejamos los cordones colgando, porque así podemos usarlos para colgar nuestro koala de donde queramos.
Y una vez anudado el cordón, quitamos los clips, y retiramos los cartones, para obtener un koala que parece recién salido de una lavadora/secadora.
Así que cogemos las tijeras, y lo pasamos por la peluquería, para podar al koala, yo suelo utilizar tijeritas de baño con la punta curva, que tienen mucha más precisión que las que enseñé en la foto de arriba.
No tengáis miedo de podar hasta obtener un koala feliz, pero ir poco a poco, que si se os va la mano, hay que volver a empezar.
Y aquí está, nuestro pequeño koala pom pom.
Con esta misma técnica, se pueden hacer todos los animales que queráis, yo he hecho un león, un tigre, un panda y hasta una pantera rosa.
Para no enrollarme mucho que con enrollar lana ya tenemos bastante, os pongo los pasos uno detrás de otro de el león.
Ahora es el turno del Oso panda.
Y este tan breve es para el tigre, pero tened en cuenta que empieza muy parecido al león.
Cada uno puede luego utilizar la combinación de colores que más bonita le resulte. Y hacer un oso no es muy diferente a hacer un panda, sólo hay que añadirle un hocico...
Si tenéis dudas, prometo montar otro DIY con más animalitos.
A disfrutar del fin de semana.
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